De la mano de Renzo Piano, el Whitney se instala en el Meatpacking District de Nueva York. Para no perder el espíritu de la contemporaneidad con el que se creó el museo, no le quedaba otra que desplazarse del Manhattan acomodado, al distrito donde desde hace ya unos años aglutina la movida artística. El Meatpacking es hoy un hervidero de galerías, bares de moda, Showrooms y a partir de este mes de mayo, su buque insignia va a ser indiscutiblemente, este edificio acristalado, de formas angulares y generosas terrazas, con maravillosas vistas entre el Rio Hudson y la línea de tren, situado en el 99 de Gansevoort Street.
Abierto, funcional el museo se eleva del asfalto neoyorquino a caminar al aire libre por sus exteriores, con la clara intención de dejar respirar al visitante a sus anchas por el arte.